Una de las premisas que nos permiten afirmar que una vivienda es habitable es el sistema que permite calentarla durante los meses de invierno. El interior de la PenÃnsula mantiene un clima mediterráneo de carácter marcadamente continental, lo que significa que, durante el invierno, las temperaturas que se experimentan en la zona son bastante bajas. He ahà la explicación que hace necesarios elementos como calderas y calentadores en muchas casas españolas.
No cabe duda de que no poseer alguno de estos elementos, o mantenerlo estropeado, es un auténtico problema de cara al advenimiento del frÃo. Durante los meses de calor que nos esperan no debemos olvidarnos de estos aparatos. De hecho, puede resultar la mejor época del año para tratar de arreglarlos o, en su defecto, cambiarlos. Todo sea por garantizar la habitabilidad de la vivienda.
Que la vivienda tenga a punto la caldera o el calentador es uno de los aspectos en los que más se suelen fijar las personas que desean comprarla. Me dedico desde hace años a la venta de pisos y chalets en varios municipios de la ciudad de Madrid y, en los últimos años, hemos sido testigos de cómo los clientes han comenzado a mostrar un interés creciente por viviendas que tienen incorporadas calderas producidas por los mejores fabricantes.
La promoción de viviendas en la que estaba trabajando hace un par de meses sirvió para que me diera cuenta del por qué de dicha situación. Dio la casualidad (o algo más que ella) de que un par de casas situadas muy cerca la una de la otra y que acabábamos de vender estaban sufriendo problemas con la caldera. Ésta no arrancaba en ninguna de las dos viviendas y, como consecuencia, las dos familias se encontraban en pleno mes de marzo sin apenas protección contra un frÃo que seguÃa azotando con bravura.
Era evidente que el fallo era nuestro y que por tanto éramos nosotros quienes deberÃamos buscar una solución. Ambas familias asà nos lo reclamaron y, por tanto, comenzamos a movernos para tratar de conseguirles dos nuevas calderas que les permitieran sentirse cómodos, algo a lo que tenÃan pleno derecho al tratarse de una vivienda de su propiedad.
Tanto yo como Enrique (otro de los miembros de la empresa que trataba de manera directa con clientes) conocÃamos una entidad que podÃa sernos de gran ayuda para conseguir las mejores calderas del mercado. Se trataba de Eco Cima, una compañÃa que se dedicaba a la venta de aparatos como los que estábamos buscando y en cuyo catálogo podÃamos ver varios de los modelos que ofertaban y sus precios. La calidad abundaba en ellos y la posibilidad de conseguir las calderas perfectas para nuestros clientes estaba ahà mismo.
La comodidad de los clientes, fundamental
Nos decantamos por los aparatos que nos suministraban desde Eco Cima. Estábamos bastante seguros de que los propietarios de las viviendas afectadas verÃan dichos productos con buenos ojos y que por tanto nuestra imagen no se verÃa afectada por los desperfectos que habÃan sufrido las calderas en las que habÃamos confiado en un principio. Y no nos Ãbamos a equivocar ni un ápice.
En pocos dÃas las nuevas calderas llegaron a sus ubicaciones. Las familias ya habÃan sufrido demasiadas incomodidades y deseábamos que los problemas se acabaran ahÃ. De eso estábamos prácticamente seguros: los profesionales de Eco Cima eran serios y cumplidores y sus productos estaban perfectamente preparados para cumplir con la función que de ellos se esperaba. Pronto iban a poder disfrutar de la mejor manera para entrar en calor en su vivienda.
Asà fue. Pocas semanas bastaron para darnos cuenta de que no nos habÃamos equivocado confiando en Eco Cima. Las calderas funcionaban y lo hacÃan bien, sin dar ningún problema y proporcionando a aquellas personas ese calor tan acogedor que caracteriza a los meses de invierno.
HabÃamos dado con la tecla. Una tecla que tenemos que seguir explotando y que asà haremos en cuanto sigamos construyendo viviendas y equipándolas con las mejores calderas que podemos adquirir en la actualidad.