Nuestro país es uno de los más deseados por los habitantes de todo el planeta para pasar sus jornadas de descanso y tiempo libre y es que nuestro clima, la gente, la cultura, las fiestas, la playa y, sobre todo, la gastronomía, hacen de España un lugar muy atractivo para desplazarse a conocerlo. Y esto se refleja cada año que pasa en las cifras de negocio de las empresas relacionadas con el sector del turismo, uno de los pocos sectores que, a pesar de la crisis que hemos vivido en los últimos años, han logrado mantenerse siempre a flote y generando importantes beneficios. Sin embargo, ¿cómo es posible que un país que sea tan atractivo para un número tan elevado de personas tenga problemas de envejecimiento poblacional? La respuesta a esta pregunta os la intentaremos dar a lo largo de este post mediante una serie de datos y de premisas que os invitarán a reflexionar y a conocer un poco mejor la realidad de nuestro país y es que en muchos casos es muy diferente de lo que creemos. Es por ello por lo que invitamos a conocer algo mejor este problema que tiene España.
Tal y como os hemos adelantado, la realidad es que resulta paradójico que un país que recibe tantos miles de visitantes cada año, tenga problemas con el envejecimiento de su población, sin embargo, esta es una realidad importante que sufre España cada día y cada vez se ve más agravada. Para que os deis cuenta de la importancia real de lo que os estamos contando os vamos a dar un dato muy interesante a la vez que preocupante y es que España será, a mediados de siglo, el segundo país más envejecido de la OCDE ya que solo nos superará Japón, y según los datos que se manejan en la actualidad, el futuro de las personas mayores quedará comprometido, sobre todo, en lo tocante a las pensiones que, los mayores actuales están cobrando y que, en un futuro no muy lejano, podrían verse seriamente en peligro debido a que no hay un relevo generacional que pueda pagarlas ni sustentarlas. Además, el informe en el que se basan estos datos da especial relevancia a las cifras de paro de nuestro país, así como a la cifra de jóvenes que ni estudian ni trabajan, dos valores clave para la realidad que os acabamos de mencionar y es que al no estudiar no lograrán nunca empleos cualificados y de calidad, así como al no trabajar no están cotizando a la Seguridad Social para que esta pueda seguir ingresando una cantidad de dinero que después pueda acabar en la hucha de las pensiones, por lo que con el paso del tiempo, esta se va agotando y lo hace a un ritmo cada vez más rápido.
Todos estos cambios en la realidad de España están haciendo que nuestro país cada vez enfoque más sus servicios a los más mayores. En este campo, SanVital es una de las compañías que más se ha apresurado a satisfacer las realidades que más necesita la gente en la actualidad, es por ello por lo que ofrece a sus clientes una residencia y unos apartamentos tutelados que son idóneos para las personas de avanzada edad que no quieren pasar sus últimos años solos o necesitan de alguien que les eche una mano. Y es que como os decimos, la población de España es cada vez más mayor, por lo que las compañías que se van creando en los últimos años, se dedican, cada vez más, a poner en valor las necesidades de todas aquellas personas mayores y, así, poder satisfacer sus necesidades.
Las nuevas tecnologías y los mayores
Nuestros mayores han nacido en una época en la que las nuevas tecnologías ni existían ni se esperaban, sin embargo, con el paso de los años, a muchos de ellos les ha entrado la curiosidad por conocer de cerca las ventajas de la red y de la telefonía móvil, es por ello por lo que cada vez más municipios y asociaciones organizan cursos de introducción a estas nuevas tecnologías, a modo de actividades formativas para que puedan conocer de primera mano los usos y beneficios de este tipo de herramientas. Además, que las personas mayores dispongan de un teléfono móvil a mano siempre es buena y es que nunca se sabe cuando pueden necesitar ayuda, por lo que, en este caso, si disponen del dispositivo, podrán solicitarla rápidamente.